martes, 29 de octubre de 2013

PORQUE YA NO ERES UN ÁNGEL - BLANCA VARELA

Porque ya no eres un ángel sino un hombre solo sobre dos
pies cansados sobre esta tierra que gira y es terriblemente
joven todas las mañanas.
Porque sólo tú sabes que hay música, jadeos, incendios,
máquinas que escupen verdades y mentiras a los cuatro
vientos, vientos que te empujan al otro lado, a tu hueco
en el vacío, a la informe felicidad del ojo ciego, del oído
sordo, de la muda lengua, del muñón angélico.
Porque tú gusano, ave, simio, viajero, lo único que no sabes
es morir ni creer en la muerte, ni aceptar que eres tú
mismo tu vientre turbio y caliente, tu lengua colorada,
tus lágrimas y esa música loca que se escapa de tu oreja
desgarrada.


miércoles, 23 de octubre de 2013

ORDEN DEL DÍA - JEAN PIERRE ROSNAY

Mantener el alma en estado de marcha,
mantener el contingente a distancia,
mantener el alma por sobre la refriega,
mantener a Dios como una idea cualquiera,
un apoyo, una eventualidad,
una comarca salvaje del universo poético,
mantener las promesas de la infancia,
mantener a raya la adversidad,
no dar cuartel al adversario,
mantener la palabra abierta,
hacer pagar caro a sus debilidades,
no dejarse arrastrar por la corriente,
mantener su rango en el rango de aquellos
que están decididos a mantener al hombre
en posición estimable,
no dejarse seducir por lo fácil
bajo el pretexto de que los peores
se elevan cómodamente al más alto nivel mientras
los mejores difícilmente mantienen el camino,
ser digno del privilegio de ser
bajo la forma más lograda: el hombre.
O mejor aún, la mujer.



martes, 15 de octubre de 2013

EN MITAD DE UN VERSO - GERARDO DIEGO

Murió en mitad de un verso,
cantándolo, floreciéndole,
y quedó el verso abierto, disponible
para la eternidad,
mecido por la brisa,
la brisa que jamás concluye,
verso sin terminar, poeta eterno.
Quién muriera así
al aire de una sílaba.
Y al conocer esa muerte de poeta,
recordé otra de mis oraciones.
«Quiero vivir, morir, siempre cantando
y no quiero saber por qué ni cuándo.»
Sí, en el seno del verso,
que le concluya y me concluya Dios.


viernes, 4 de octubre de 2013

A LA MISTERIOSA - ROBERT DESNOS

Tanto he soñado contigo que pierdes tu realidad.
¿Habrá tiempo para alcanzar ese cuerpo vivo
y besar sobre esa boca
el nacimiento de la voz que quiero?
Tanto he soñado contigo,
que mis brazos habituados a cruzarse
sobre mi pecho, abrazan tu sombra,
y tal vez ya no sepan adaptarse
al contorno de tu cuerpo.
Tanto he soñado contigo,
que seguramente ya no podré despertar.
Duermo de pie,
con mi pobre cuerpo ofrecido
a todas las apariencias
de la vida y del amor, y tú, eres la única
que cuenta ahora para mí.
Más difícil me resultará tocar tu frente
y tus labios, que los primeros labios
y la primera frente que encuentre.
Y frente a la existencia real
de aquello que me obsesiona
desde hace días y años
seguramente me transformaré en sombra.
Tanto he soñado contigo,
tanto he hablado y caminado, que me tendí al lado
de tu sombra y de tu fantasma,
y por lo tanto,
ya no me queda sino ser fantasma
entre los fantasmas y cien veces más sombra
que la sombra que siempre pasea alegremente
por el cuadrante solar de tu vida.